Tratamiento para la depresión en infantes

    Frecuentemente el tratamiento de la depresión en niños y adolescentes requiere la combinación de psicoeducación a los padres, psicoterapia y una medicación.


1. Tratamiento con medicación: 

    Los antidepresivos que han demostrado en estudios científicos ser eficaces en niños y adolescentes con depresión son los inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS). Estos medicamentos no son drogas, no crean dependencia ni adicción, ni cambian la personalidad del niño. Aunque primero se intenta con la terapia verbal, ya si no se ven avances con está si debemos medicarlos. (Dra. Manglano, P. 2020)


2. Tratamiento con psicoterapia al niño y a la familia:

    Es importante un apoyo con psicoterapia al niño y a la familia, ya que muchas veces los padres se culpan erróneamente de los problemas o dificultades del niño, y esto ayudara a los padres a saber la forma correcta como deben tratar a sus niños y además, desahogaran su sentimiento de culpa . También el niño se ha acostumbrado a percibir las cosas negativamente. Estas ideas negativas deben ir cambiando con el tratamiento a una visión más realista.(Dra. Manglano, P. 2020)



¿Cómo puedes ayudar a un niño con síntomas de depresión?

     Depresión Infantil - ¿Cómo tratarla adecuadamente? ¿Se puede evitar? (s. f.). [Fotografía]. Depresión Infantil - ¿Cómo 

tratarla adecuadamente? ¿Se puede evitar? https://images.app.goo.gl/FgKxjrqgumZqzbqt7



La siguiente lista de sugerencias puede ayudar a los padres con los síntomas más comunes de la depresión en niños:

  • Autoestima baja y tendencia a criticarse a sí mismo: elogia al niño frecuentemente con sinceridad, reforzando conductas concretas y acentúa lo positivo.
  • Culpabilidad: ayuda al niño a distinguir entre los acontecimientos que él puede controlar y los que están fuera de su alcance: ayúdalo a que comience a hablar  positivamente de sí mismo.
  • Estabilidad familiar: mantén una rutina y disminuye los cambios en asuntos familiares; coméntale acerca de los cambios con anticipación para reducir las preocupaciones.
  • Desesperación e impotencia: pide al niño que escriba o hable de sus sentimientos y que anote sus pensamientos placenteros.
  • Pérdida de interés y tristeza: prepara una actividad interesante al día; planifica acontecimientos especiales; comenta temas agradables.
  • Apetito y problemas de peso: no lo obligues a comer y prepara sus comidas favoritas (esto puede causar que la hora de comer sea más placentera para el niño).
  • Dificultades para dormir: mantén un horario constante para que tu hijo duerma y participa  con él en actividades relajantes como leer o escuchar música antes de dormir. (Faros Sant Joan de Déu, 2020)


Autoras: Andrea Gómez y Marianys Villarreal

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